Los residuos plásticos ahogan los océanos

El Medio Ambiente ha emitido varios mensajes de auxilio a lo largo de los últimos años. Algunos están empezando a ser escuchados y atendidos por parte del ser humano pero otros siguen sin tener respuesta y, lo que es peor, su solución es cada vez más compleja. Este es el caso de los océanos y la basura plástica que cada día limita más la vida que habita en ellos.

El día 8 de Junio se celebra el Día Mundial de los Océanos, y desde la Asociación Ambiente Europeo (AAE) se protegen los océanos a través de distintas líneas de trabajo de lucha contra las basuras marinas, especialmente las que están compuestas por plásticos, en colaboración con diferentes entidades y organizaciones, entre las que se encuentra Ecoembes.

El pasado 5 de julio se celebró el Día Mundial del Medio Ambiente, pero no se trata de una fecha para celebrar ningún hito, sino para reivindicar una mayor lucha frente a atentados medioambientales como los 7 millones de toneladas de basura que se vierten cada año al mar, según un estudio elaborado por la AAE.

Este dato escalofriante se une al hecho de que con el paso de los años la tendencia es negativa y parece no tener un receso inmediato. Según este mismo estudio, la cantidad de desperdicios plásticos que flotan en los océanos ha aumentado más de cien veces en los últimos cuarenta años.

El gran manto azul que nos rodea se está convirtiendo en un gran vertedero y en un gran depósito de desechos generado por una sola especie, el ser humano.

Esta circunstancia revela graves problemas de concienciación ambiental por parte de la población mundial, una escasa educación en esta materia y un deterioro en las generaciones sucesivas, que lejos de detectar el problema lo agravan con más basura que retirar de nuestras costas o alta mar.

El ser humano debe ser el altavoz de toda especie, marina y vegetal, que habitan, o más bien subsisten en estos océanos cada vez más contaminados y afectados por la huella humana.

Es un momento para reflexionar sobre el futuro de uno de los grandes regalos que nos ha brindado este planeta, y que estamos desechando con nuestros malos hábitos y nuestro egoísta estilo de vida.

¡Atendamos su SOS y lancemos un salvavidas para evitar que nuestros océanos se ahoguen!