Respetar los sentimientos...

RESPETO. Entiendo que una sociedad se construye cuando se establece el respeto de unos hacia otros. Nace en el seno de la familia, especialmente de la figura de los padres que marcan unos ciertos límites, que han de ser respetados. Uno de los aciertos de una cultura es el grado de respeto y de autolimitación que sus miembros se imponen, surge la justa medida. Si se rompen los límites, aparece la falta de respeto y las imposiciones...

Respeto supone reconocer al otro como otro y su valor específico, bien sea persona u otro ser. Apunta a conservar y elevar la vida hasta su máximo valor. Lo propio es que el ser humano respete hasta al menor ser de la creación, sea animal o vegetal; la gran tragedia es no respetar.

Hay un puntito que me gustaría destacar, que es cuando al Respeto se incorporan los sentimientos, nos referimos que es normal que nos aflore "no sólo respetar sino respetar los sentimientos, de otros y los propios". Emergen los sentimientos del patrimonio cultural, de nuestros mayores, de los recuerdos, de nuestra biodiversidad, nuestro capital natural y cultural, del paisaje, etc. Es un hecho, en gran medida, asumimos la responsabilidad social por los sentimientos. Con ese valor añadido, incorporamos más actitudes de RS Medioambiental y asumimos los mandatos de la UNESCO: patrimonio cultural y desarrollo sostenible y responsable y el concepto de SOSTENIBILIDAD: aquel desarrollo que satisface las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades, como propios.

La cultura moderna está asentada sobre una brutal falta de respeto tanto hacia la naturaleza como hacia las personas consideradas inferiores. Una sociedad que actúe para cambiar la que existe es esencial. Una sociedad rural, con oportunidades para todos. Una sociedad crítica y libre, de personas íntegras y con criterio. Una sociedad solidaria tanto con las personas como con el medio ambiente. Una sociedad justa e igualitaria en la que las buenas ideas tengan la promoción y el desarrollo adecuados.

Respetar los sentimientos es volverse un simple ser humano que hace siempre alguna cosa por pequeña que sea por el Medio Ambiente, en sentido amplio.