Compañía Cervecera de Canarias -CCC-
Por qué es una prioridad
Los efectos del cambio climático pueden tener consecuencias muy diversas en aspectos como la disponibilidad de agua y la producción agrícola, factores que no sólo son clave para la fabricación de cerveza, sino también para la conservación del entorno de un territorio tan sensible como Canarias.
Utilizamos la energía para producir y transportar nuestros productos y perseguimos ser más eficientes, reduciendo nuestro impacto y explorando fuentes de energía más limpia para, en última instancia, lograr ahorros económicos y de recursos y reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
Qué hacemos para mejorar la eficiencia en el consumo de energía y reducir nuestras emisiones
Mantenemos una aproximación global para gestionar la energía y las emisiones. Tenemos en cuenta la huella de carbono asociada a nuestra cadena de valor, centrándonos en particular en la fabricación de los envases y embalajes, en el transporte y en la refrigeración de nuestros productos.
Queremos que nuestras operaciones sean cada vez más eficientes, lo que conlleva que debemos mejorar los sistemas de medida, la implicación de las personas y la inversión en nuevas tecnologías. Para ello, evaluamos la forma en que se está haciendo uso de la energía y los comportamientos que deberían ser introducidos, además de calcular la inversión requerida. En gran parte de las posibilidades de mejora detectadas, no se precisaban recursos económicos para implantarlas, por lo que algunas de ellas fueron puestas en marcha de inmediato.
Durante el ejercicio y al igual que procedimos con el agua, realizamos un análisis exhaustivo del consumo energético por área y por algunas de las instalaciones individuales, lo que nos permitió llevar a cabo intervenciones muy concretas con impactos claramente visible en el consumo. También en el caso de la gestión de energía, se implantaron nuevos sistemas de medida para reducir los intervalos de medición e incrementar el rigor en el control de consumos.
Algunas de las medidas que produjeron mejores resultados fueron la sustitución de condensadores evaporativos y el evaporador CO2 por unos más eficientes, la instalación de un purgador de aire automático en la maquinaria de refrigeración, una completa auditoría del sistema de frío, la reducción de la presión del vapor y el tiempo de ebullición del mosto en el cocimiento, el aislamiento de tuberías con fluidos fríos y calientes.
El conjunto de acciones que fueron llevadas a cabo dieron como resultado nuevas disminuciones del consumo energético por litro de cerveza producido (4%) y de emisiones de CO2 por consumo de fuel (6%).
La Compañía aspira a lograr el ambicioso objetivo de reducir su consumo específico de energía hasta 100 Mj/hl en el 2020.