Recogida selectiva puerta a puerta

¿En qué consiste la recogida selectiva puerta a puerta (PAP)?

La recogida selectiva puerta a puerta, es un sistema de recogida de los residuos por fracciones, de forma que no se mezclen los residuos que generamos. Según este sistema, las diferentes fracciones de residuos generadas son recogidos por separado, los diferentes días de la semana en los hogares, bares, restaurantes, comercios,...

Con el sistema PAP, se retirarían todos los contenedores de la vía pública, a excepción de los contenedores verdes para el vidrio.

Hay diferentes sistemas de recogida; a continuación se describe el sistema más común, que además es con el que se consiguen los índices de recuperación más altos.

     • En la recogida selectiva puerta a puerta distinguimos 5 fracciones, y cada cual tiene su color distintivo: la materia orgánica, el marrón; los envases ligeros, el amarillo; el papel y cartón, el azul; el vidrio, el verde; y el rechazo, el gris.
     • Cada día de la semana se deposita una fracción diferente. Teniendo en cuenta que el 90% de los residuos que generamos actualmente son reciclables, es lógico que la mayoría de los días se destinen a la recogida de los mismos.
     • Cada fracción tendrá su modo de entrega. Así por ejemplo los envases ligeros en bolsas de plástico; el papel y cartón en bolsas de papel o cajas de cartón.
     • En el puerta a puerta, tal y como se realiza en sistema de contenedores, se establece un horario para depositar los residuos. De esta manera, los residuos permanezcan solamente unas pocas horas en la vía pública.

El sistema puerta a puerta es un modelo de recogida extendido desde hace mucho tiempo por todo el mundo. Además es adaptable. Eso significa, lógicamente, que existen varios modelos en el mundo y que cada uno de ellos tiene sus características particulares.

El sistema se puede poner en práctica de manera progresiva y parcial. En teoría, se puede utilizar para recoger todas las fracciones de los residuos municipales o sólo unos determinados tipos de residuos. Su distribución también puede variar. Se realiza en todo el municipio o en combinación con la recogida mediante contenedores en determinadas zonas (urbanizaciones, viviendas diseminadas, etc.).

Ventajas e inconvenientes

En la implantación y correcto desarrollo de un sistema PAP, la concienciación ecológica de los ciudadanos es la clave. Se precisa de un cambio de hábitos, ya que tirar la basura mezclada a cualquier hora es más fácil y cómodo, que tener que separar los residuos en casa y guardarlos hasta que sea el día de recogida correspondiente.
Un sistema PAP correctamente implementado mejora las tasas de reciclaje y su calidad porque los consumidores se responsabilizan de la separación adecuada de los residuos. La recogida selectiva bruta oscila entre un 65% y un 85%, y los impropios (residuos clasificados de forma incorrecta) en el sistema puerta a puerta son inferiores al 10%.

Ventajas:

  • Niveles más altos de recogida selectiva y bajo nivel de residuos impropios.
  • Reducción de la cantidad de la fracción resto (residuos destinados a vertedero o incineradora).
  • La desaparición de los contenedores de la calle
  • El coste de reciclaje es menor y los ingresos por sistemas integrados de gestión, venta de materiales y retorno del canon de residuos (donde haya) son superiores.

Inconvenientes:

  • Se necesita una campaña muy importante de sensibilización entre la población.
  • Supone un cambio de hábitos importante para muchos hogares.
  • Está sujeto a un horario de entrega bastante estricto.
  • Es necesario guardar cada fracción de los residuos en casa hasta el momento de la recogida.
  • El coste parcial de recogida tiende a ser similar o, en todo caso, algo superior.

Situación en España

En España este sistema de recogida selectiva tiene cada vez más seguidores.

En Cataluña por ejemplo hay 106 ayuntamientos de los 946 que tiene, que han implementado el sistema de PAP. Y ya se plantea la implantación en grandes ayuntamientos como pueden ser Vic, Hospitalet de Llobregat o Badalona.

Pero los municipios catalanes no son los únicos: Candás en Asturias, María de la Salut y Puigpunyent i Esporles en Mallorca, o Usurbil en Guipúzcoa llevan varios meses de experiencia. También Oiartzun y Hernani, otras dos localidades guipuzcoanas, planean sumarse en breve.

En términos generales el sistema se viene aplicando en municipios con poblaciones reducidas, sin embargo, ejemplos en países europeos como Italia y Alemania, confirman que el cambio de escala no tiene por qué afectar al buen desarrollo del sistema.