Cada vez más empresas introducen medidas de eficiencia y ahorro energético en su gestión, que suponen también una buena imagen de marca. Cumplir con los parámetros de eficiencia energética es el reto de las empresas.
Lo cierto es que cuantos menos recursos, energía, desechos, contaminación…, mayor será el beneficio tanto para el medio ambiente como para la empresa porque sus costos de producción disminuirán. Además, se trata de una buena oportunidad para hacer negocios, pues con más frecuencia el mercado está dejando de consumir una marca si sabe que la empresa no es responsable con el medio ambiente.
Por tanto, la implementación de prácticas y gestos ecoeficientes en la gestión empresarial de las Pequeñas y Medianas empresas es una excelente oportunidad para generar no solo un considerable ahorro económico, sino un impacto positivo en la sociedad y en el medio ambiente. De hecho, ya nadie duda de que la eficiencia y el ahorro energético son claves para mejorar la competitividad de las empresas y crear empleo. Estas prácticas deberán cubrir los siguientes ámbitos estratégicos:
- Una impresión responsable y uso eficiente del papel y el tóner.
- Minimización y gestión sostenible de residuos.
- Uso eficiente de energía eléctrica (iluminación y climatización).
- Uso eficiente del agua.
- Uso de materiales con menor impacto ambiental (papel reciclado, materiales
ecológicos, etc.)
Con ello conseguirás mejorar y volver más eficiente tu trabajo, impulsar los recursos de tu oficina y convertirla en más productiva, placentera y comprometida en materia ambiental y crear una cultura responsable en tu lugar de trabajo.
Así, por ejemplo para reducir, recuerda utilizar las dos caras de los folios, para escribir, fotocopiar o imprimir; pregúntate si realmente es necesario imprimir un correo electrónico o un borrador de un documento. Para reutilizar, acumula el papel que sólo se haya utilizado por una cara y vuelva a utilizarlo para imprimir borradores o como libreta de notas; y vuelve a utilizar un sobre cada vez que sea posible. Y para reciclar, diferencia cada recipiente con un color en particular, para facilitar la separación de los residuos; una buena idea es utilizar recipientes transparentes para diferenciar donde hay que depositar cada producto.
Conseguirás ahorrar energía si apagas las luces de las zonas o despachos que estén vacíos, o apagando el ordenador al finalizar la jornada laboral y durante el horario del descanso. Y para ahorrar agua, puedes establecer un plan de ahorro de agua en la limpieza; o colocar algún dispositivo de doble carga en cisternas, siempre que sea posible.
Por último, recuerda considerar los desplazamientos de tu domicilio a tu lugar de trabajo, y utiliza sistemas de movilidad alternativos y medios de transporte más sostenible. Potencia el desplazamiento a pie, el transporte público y la bicicleta. Y cuando sea inevitable usar el coche, trata de introducir el sistema de coche compartido como opción eficiente.
Recordemos algunos de los beneficios para tu empresa al introducir medidas ecoeficientes en la oficina:
- Disminuye los costes de producción.
- Minimiza el impacto ambiental vinculado a las actividades de la oficina.
- Genera un ahorro económico con un consumo responsable (agua, energía, dispositivos y material de oficina como tóner...etc.)
- Gestiona los residuos de manera sostenible.
- Mejora la imagen de marca y el prestigio de la empresa.
- Aumenta el compromiso ambiental
- Reduce la emisión de contaminantes
- Mejora de la productividad de los empleados que se sentirán implicados en una entidad preocupada por el cuidado del medio ambiente.
- Mantiene un ambiente laboral sólido
- Será normal que al ser ecoeficiente, se traduzca en crecimiento económico.
- Se impulsará el desarrollo sostenible local y global.
Te animamos a que investigues gestos ecoeficientes que puedas aplicar en tu oficina, que reconozcas buenas prácticas ambientales y las implementes en tu entorno laboral, para actuar con respecto al medio ambiente. ¡Por una oficina ecoeficiente!