El Sol

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El SOL, además de su propia capacidad para generar energía, está en el origen de todas las energías renovables, en definitiva, es la fuente de la vida en la tierra y, debemos aprovechar su energía y las que, a partir de su influjo, la naturaleza transforma. En este marco, las tecnologías son las que tienen la potestad para configurar el futuro.

 El aprovechamiento de la energía solar emerge tímidamente aunque firme tras siglos de abandono. Naturalmente, se augura un futuro muy prometedor para el conjunto de las energías renovables, no sólo por su carácter de energía limpia, inagotable y autónoma, sino por su capacidad de abastecimiento energético y de contribución al desarrollo rural y a la creación de empleo en las zonas más desfavorecidas del planeta.

La preocupación de la Comisión Europea por la eficiencia y el ahorro energético es una realidad, la reciente adopción de un Libro Verde “Estrategia europea para una energía sostenible, competitiva y segura” donde establece las bases de la futura política energética europea así lo demuestra.

La respuesta internacional, ante el reto del cambio climático, también se ha materializado en la Convención del CC y en el Protocolo de Kioto, que tiene como objetivo último lograr una estabilización de las concentraciones de GEI y supone un cambio en la tendencia energética con el refuerzo del uso del gas y de las energías renovables. En la promoción de las políticas de eficiencia energética y aumento de energías renovables, la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías es y será una constante. De cualquier manera, hoy por hoy, no existe una alternativa real a las energías fósiles para satisfacer la gran demanda de energía.

Los protagonistas en las Energías Renovables, fundamentalmente, son:

I) La fotovoltaica. Todavía le queda un largo recorrido, ahora bien, aunque aumenta a ritmos crecientes no deja de tener un peso marginal en el conjunto de la generación eléctrica. La ayuda pública es la responsable de su impulso. Destacar que la tecnología actual está dejando paso a nuevos conceptos, aunque todavía no están suficientemente evolucionados.

Subrayar que proliferan las Centrales termo-solares que implican siempre diseños de tecnologías de concentración, donde por medios ópticos la cantidad de energía solar que recibe la célula fotovoltaica es mucho mayor, lo que permite aumentar sustancialmente su rendimiento.

II) La eólica. Conlleva máquinas de gran potencia aunque por su poca flexibilidad de gestión se están imponiendo las de potencia media-alta con velocidad variable y equipos de control electrónico de la potencia generada, permitiendo mejorar la calidad de suministro.

Los otros representantes en la producción de energía son: Biomasa, Biocombustibles, Hidroeléctrica, Energías del mar, Geotérmica, aunque, en su conjunto, con un papel en la generación eléctrica mucho menor. Ver a continuación las Energías renovables…