Transcurridas las elecciones municipales, insulares y autonómicas, los nuevos equipos de gobierno deben satisfacer una de las demandas más importantes de su principal cliente, el ciudadano, que no es otra cosa que resolver su preocupación por el Medio Ambiente. No es tarea fácil porque a la complejidad y dimensión del Medio Ambiente se une el hecho de que nuestro modelo de gestión de política medioambiental no está totalmente cuajado, ni suficientemente sincronizado.
Los ciudadanos no entienden demasiado de reparto competencial pero si entienden que las diferentes administraciones no pueden eludir dicha responsabilidad y ya que la local es la más próxima al ciudadano, es la administración que toma el pulso día a día a la calle, a los barrios, la que conoce mejor al ciudadano y sus realidades, su área de Medio Ambiente necesita, partiendo de una radiografía del Municipio y examinadas las posibilidades que se encuentran de cara a posicionar las cuestiones y problemas medioambientales, resolver dichas cuestiones y problemas de poca calidad ambiental e ir más allá, definir proyectos de futuro, siempre en total sintonía con su Cabildo y el Gobierno Canario. Para ello, será necesario,
Uno. Eexaminar cuál es el tejido empresarial por zonas y qué perfiles de calidad ambiental son los más demandados, lo propio sería apoyarse en las organizaciones empresariales.
Dos. En el ámbito de la educación, llevar la educación medioambiental a colegios e institutos, a los jóvenes, y a los ciudadanos en general, para informarles sobre la necesidad de << cómo mejorar los cambios, que se corresponde con el debilitamiento del fuerte vínculo que existe entre actividad económica y emisión de GEI, y cuidar el MA en la vida cotidiana, tanto dentro como fuera del entorno laboral >> incorporando una cultura abierta de Responsabilidad Social Medioambiental, individual y colectiva, uno de los grandes retos de nuestro mundo.
Tres. Definición de nuevos proyectos medioambientales.
No sólo la colaboración pública es esencial sino la pública-privada. Lo acertado sería incluir iniciativas de relaciones bilaterales que permitan el intercambio con la Sociedad, para que se proyecte una Ola de Energía: Institucional, Empresarial y Ciudadana, que fomente sinergias para tener más IMPACTO.