Ayudas para la eficiencia energética

En los últimos años se ha apreciado una mayor concienciación por parte del ciudadano, en lo que a la eficiencia energética de las instalaciones se refiere. Muchas personas parecen haber entendido el mensaje que desde las administraciones y organizaciones se ha enviado en este sentido, a aplicar a edificios y otros recintos particulares, especialmente en los casos en los que se sobrepasa un límite de antigüedad.

De esta manera, se ha demostrado que esta recomendación tenía un por qué, tanto por los beneficios económicos que supone a la larga para el propio usuario, como por el favor que le hacemos a un planeta cada día más castigado y fatigado.

Un aspecto aún desconocido por la mayoría es el sistema de ayudas que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, ha puesto a disposición de determinados usuarios para cumplir con el Real Decreto 253/2013, que obliga desde junio de 2013 a determinados inmuebles a poseer el certificado de eficiencia energética.

Con este motivo nace el Programa de Ayudas para la Rehabilitación Energética de Edificios Existentes (PAREER-CRECE). Para este sistema de financiación se han previsto 200 millones de euros que servirán para realizar diferentes reformas en edificios y viviendas con el objetivo de hacerlas energéticamente más eficientes.

Existen cuatro tipos de acciones que se verán beneficiadas por estas ayudas:

  1. Mejora de la eficiencia energética en la envolvente térmica.
  2. Mejora de la eficiencia energética de las instalaciones térmicas y de iluminación.
  3. Sustitución de energía convencional por biomasa en las instalaciones térmicas.
  4. Sustitución de energía convencional por energía geotérmica en las instalaciones térmicas.

Del mismo modo, existe un quinto grupo de casos en los que es posible acceder a una ayuda adicional que afecta a Viviendas de Protección Oficial, de Promoción Pública o que estén situadas en áreas de regeneración y renovación urbanas.

Los beneficiarios de este programa de ayudas  serán los propietarios de edificios ya existentes, comunidades de propietarios o agrupaciones de comunidades de edificios, empresas arrendatarias o concesionarias y compañías de servicios energéticos.

El límite de tiempo está marcado hasta el 31 de diciembre de 2016, salvo que el presupuesto indicado se agote con anterioridad. Una vez superada dicha fecha no se admitirán más solicitudes ni trámites.