Anaga, Reserva Mundial de la Biosfera

El Macizo de Anaga alberga el paraje natural con más especies endémicas de Europa. La zona acoge la mayor parte de flora de Tenerife, tratándose del único lugar de Canarias donde se encuentran representadas todas las especies de árboles característicos del monteverde.

Además, cuenta con una fauna muy diversa, pues en él no solo se hayan reptiles, aves, peces y mamíferos, sino que destacan la cantidad de invertebrados. En este espacio, conviven hasta 1.910 especies inventariadas, de las cuales 512 viven exclusivamente en Canarias, 329 son endémicas de Tenerife y 95 son exclusivas de la zona.

Sus paisajes agrarios, la altura de sus acantilados, la inclinación de las laderas, la profundidad y desembocadura de sus barrancos, la presencia volcánica, sus diferentes miradores y las playas escondidas le llevaron a ser declarado Reserva de la Biosfera por el Consejo Internacional de Coordinación del Programa Hombre y Biosfera (MAB) de la Unesco el 9 de junio de 2015.

Te invitamos a dar un paseo por algunos de los parajes de mayor encanto de este macizo.

Comenzaremos por el sendero de los sentidos, que parte de la Cruz del Carmen, en donde también se encuentra el centro de visitantes. Este sendero ofrece a los caminantes tres recorridos diferentes en función de la movilidad. Las diferentes rutas te adentran en el monteverde para descubrir los secretos que esconde la laurisilva. Es la mejor opción para conocer los antiguos pueblos, pues se trata de un antiguo camino real que unía los asentamientos de Anaga con La Laguna.

Muy cerca se encuentra la pista de Las Hiedras, un camino rodeado de laurisilva y fayal-brezal. Esta ruta comienza en la carretera de El Batán y es otra de las más visitadas por turistas debido a la sencillez de su recorrido circular. Muchos caminantes optan por este sendero, ya que cuenta con tramos adaptados para personas con movilidad reducida y permite visitar los distintos pueblos rurales de la zona.

Si el objetivo es disfrutar de paisajes increíbles para finalizar en una playa, la mejor opción es la ruta Afur-Taganana. El recorrido por estas poblaciones tradicionales te lleva a hacer un recorrido en el tiempo. A pesar de su longitud, muchos ciudadanos escogen esta ruta por las vistas desde acantilados a los diferentes roques de los pueblos de Anaga, además de ser un sendero que termina en la costa, en concreto, en la playa virgen de Tamadite.

El Parque Rural de Anaga ofrece dos rutas para las que es necesaria autorización del Cabildo de Tenerife, ya que se tratan de reservas naturales protegidas. La primera de ellas es El Pijaral, considerada como la más bonita de la Isla por ser una de las mejores zonas que conserva la laurisilva. Conocida como El Bosque Encantado, las condiciones de humedad y temperatura permiten albergar impresionantes bosques de helechos. Este recorrido esconde una de las mejores vistas de la Reserva Natural.

El otro espacio protegido se trata del Monte de Aguirre, cuyo sendero te lleva a adentrarte en espectaculares bosques de laurisilva. Esta zona está considerada como un lugar con una rica biodiversidad que abarca muestras de monteverde canario y diversas especies de flora y fauna únicas en el mundo.